Las vacaciones solo para adultos se están convirtiendo en toda una tendencia y cada vez son más las personas que buscan hoteles destinados exclusivamente a mayores de edad. Hay quienes desean pasar unos días de descanso tranquilos, quienes son padres, pero quieren pasar un fin de semana romántico sin niños, o bien quienes buscan una oferta de servicios y entretenimiento especialmente diseñados para su edad. En cualquier caso, cada vez proliferan más los alojamientos de este tipo y las Islas Canarias se han configurado como un destino pionero en ofrecer este concepto vacacional.
Su clima cálido, al que no le afectan las estaciones, sus maravillosas playas y una biodiversidad que pocos lugares del mundo poseen convierten a estas islas en un destino más que apetecible para quienes busquen unas vacaciones solo para adultos en cualquiera de sus cuatro provincias.
Tenerife
La capital canaria es la mayor isla del archipiélago y posee una gran diversidad paisajística que oscila entre los bosques tropicales del norte y el casi desértico aspecto del caluroso sur. Es el sur de Tenerife precisamente el que atrae a los viajeros más jóvenes y goza de un ambiente muy animado. El Parque Natural del Teide, que posee el pico más alto de España y uno de los mayores volcanes del mundo, es uno de los lugares a visitar, único en belleza. La oferta de ocio es amplísima y podrás practicar deportes como el submarinismo, la escalada, la pesca de altura, el golf y la vela.
Gran Canaria
El sur de Gran Canaria es su parte más turística, donde se sitúan sus playas, perfectas para relajarse, y se concentra la mayor oferta de hoteles solo para adultos en Las Canarias. Al norte, encontrarás la parte montañosa, ideal para explorar sus cuevas prehistóricas y restos arqueológicos. Otras aventuras que pueden realizarse son las excursiones en barco, para ver de cerca la diversidad de su fauna marina, y la vela latina, una tradicional forma de navegar en pequeños barcos. Durante el verano, existen competiciones de esta disciplina.
Lanzarote
Quienes busquen un destino tranquilo, encontrarán en Lanzarote el destino perfecto. Esta isla de carácter agrícola posee en su capital, Arrecife, la mayor actividad, con su intenso ritmo comercial. Ir de compras y pasear entre sus calles te permitirán admirar la arquitectura de edificios como los castillos de San José y San Gabriel del s. XVIII, la iglesia de San Ginés del s. XVII o la actual Casa de la Cultura, una antigua casona nobiliaria del s. XIX. La riqueza de sus espacios naturales, con el volcán Timanfaya a la cabeza, la han elevado a la categoría de Reserva Natural de la Biosfera. Imprescindible una parada en la cueva Jameos del Agua, singular creación del arquitecto César Manrique en la que arte y naturaleza se fusionan, y la Cueva de los Verdes, un antiguo escondite de los lugareños para ocultarse de los piratas.
Fuerteventura
Es la más antigua y menos poblada de las islas canarias. Azotada por el viento del Levante y con un aspecto mucho más árido, no por ello está exenta de encantos. Su capital, Puerto del Rosario, fue lugar de destierro de Miguel de Unamuno y la casa donde vivió es ahora un museo que puedes visitar. Betancuria es, probablemente, el rincón más bonito. Asentada sobre el cráter de un volcán extinguido, apenas supera los 700 habitantes y posee una importante tradición artesanal.
